1,000 signatures reached
To: President Julio Frenk
University of Miami, Pay & Protect ALL Employees
.jpg)
(Desplácese hacia abajo para la traducción al español)
Dear University of Miami Community,
A Culture of Belonging includes ALL community members!
During this time of crisis, UM Janitors and Groundskeepers are forced to choose between losing their paycheck and working under conditions of fear and uncertainty. Other subcontracted employees, like Dining Workers, have been laid off and many find it impossible to get through to Unemployment Offices as they join millions in line.
Employees have shared that they are scared of contracting the coronavirus on the job and are worried about using harsher disinfectants that are corrosive to the respiratory system and skin.
In a collective action for mutual care and survival, 321 subcontracted employees delivered a petition to President Frenk advocating their own livelihood under the pandemic. In step with employees, we are calling on the University of Miami to immediately require the following for the economic security, health, and well-being of workers:
1. Require that subcontracted workers receive Paid Time Off (PTO) and continued benefits through this crisis and not be laid off. No one should lose a job nor healthcare.
2. Working on campus during the pandemic should be voluntary. For those subcontracted employees who decide to continue working throughout this crisis, 1.5x hazard pay will better meet their needs.
3. Require that preventative measures be implemented in workplaces to reduce the risk of employees contracting and thereby transmitting COVID-19. Employees must receive adequate protective gear and supplies prior to cleaning in the pandemic, including masks.
4. Immediately make employees aware of positive cases of individuals who may have entered workplaces. Provide free testing for all employees who work in such buildings or have come in contact with a positive case on the job.
5. Open communication between President Frenk, subcontracted employees, including Janitors, Groundskeepers, and Dining Workers, their representatives, and their supporters of undergraduate and graduate students, faculty, and staff to share knowledge about the UM community’
Why is this important?
This is a matter of life or death. Subcontracted employees like Janitors, Groundskeepers, and Dining Workers make an average of $11 per hour – and most live paycheck-to-paycheck. Many are older. Reports all over regarding the pandemic have already demonstrated that groups and other populations who are historically marginalized are bearing the greatest shock of the pandemic's impact.
We can join a growing number of universities like Harvard University, the University of Chicago, and Washington University who have leveraged institutional resources so that subcontracted workers and their families can weather this storm by guaranteeing income and benefits through May 28, June 13, and the end of contracts, respectively.
A unified and wide-spread campus response is the only way to live out our values of social justice and public health for all. We must believe in these values now more than ever. We, the undersigned, implore the university to mobilize a systemic response for those on the front lines of the pandemic. Our actions now will define the University for years to come.
We are in this together as one U!
(scroll down to sign)
Querida comunidad de la Universidad de Miami:
¡Una cultura de pertenencia incluye a TODOS los miembros de la comunidad!
Durante este tiempo de crisis, los empleados de mantenimiento y aseo de UM se están viendo obligados a elegir entre perder su sueldo o trabajar bajo condiciones de miedo e incertidumbre. Otros empleados subcontratados, como los trabajadores de servicios alimenticios, han sido despedidos y muchos no han podido aplicar a los beneficios de las Oficinas de Desempleo debido a los millones de personas que se encuentran en la misma situación.
Los empleados han manifestado que tienen miedo de contraer el coronavirus en el trabajo y están preocupados de usar ciertos desinfectantes, los cuales son tan agresivos que hasta pueden causar irritaciones en la piel y el sistema respiratorio.
En una iniciativa colectiva para el cuidado mutuo y la supervivencia, 321 empleados subcontratados entregaron una petición al presidente Frenk abogando por su propio sustento bajo la pandemia. En sintonía con los empleados, pedimos a la Universidad de Miami que exija de inmediato lo siguiente para la seguridad económica, la salud y el bienestar de los trabajadores:
1. Los trabajadores subcontratados reciban tiempo libre pagado (PTO) y beneficios continuos durante esta crisis y no sean despedidos. Nadie debe perder un trabajo ni la asistencia sanitaria.
2. Trabajar en el campus durante la pandemia debe ser voluntario. Aquellos empleados subcontratados que deciden continuar trabajando durante esta crisis, recibirán un pago de riesgos de 1.5 veces su salario para satisfacer mejor sus necesidades.
3. Exigir que se implementen medidas preventivas en los lugares de trabajo para reducir el riesgo de que los empleados se contraigan y, por lo tanto, transmitan COVID-19. Los empleados deben recibir equipo y suministros de protección adecuados para la limpieza en la pandemia, incluidas máscaras/tapabocas.
4. Se informe inmediatamente a los trabajadores sobre casos positivos de personas que puedan haber ingresado a sus lugares de trabajo. Adicionalmente, proporcionar pruebas gratuitas para todos los trabajadores que trabajan en dichos espacios.
5. Comunicación abierta entre el Presidente Julio Frenk, los trabajadores subcontratados, incluidos los empleados de mantenimiento, aseo y alimentación, así como sus representantes y aliados en UM, para compartir conocimiento sobre la comunidad de UM.
¿Por qué es esto importante?
Este es un asunto de vida o muerte. Los empleados subcontratados como los empleados de mantenimiento, aseo y alimentación mantienen nuestro campus en funcionamiento. Ganan un promedio de $11 por hora, y la mayoría viven de los ingresos del día a día. Muchos son mayores. Los informes sobre la pandemia ya han demostrado que los grupos y otras poblaciones históricamente marginadas, están siendo afectados de manera desigual.
Podemos unirnos a un número creciente de universidades como la Universidad de Harvard, la Universidad de Chicago y la Universidad de Washington, que están aprovechando los recursos institucionales para garantizar que los trabajadores subcontratados y sus familias puedan sobrellevar esta tormenta garantizando ingresos y beneficios hasta el 28 de mayo, 13 de junio, y el fin de los contratos, respectivamente.
Una respuesta unificada y generalizada en el campus es la única forma de demostrar nuestros valores de justicia social y salud pública para todos. Debemos creer en estos valores ahora más que nunca. Nosotros, los abajo firmantes, imploramos a la universidad que movilice una respuesta sistémica para quienes están en la primera línea de la pandemia. Nuestras acciones ahora definirán la Universidad en los años venideros.
¡Estamos juntos en esto como una U!
